Cuando haces un abrigo, una de las grandes decisiones que tienes que tomar es qué usar en el interior del abrigo, lo cual se llama forro. El forro es lo que sientes contra tu piel, por lo que elegir uno bueno es importante. Aunque hay muchas opciones disponibles, algunos materiales son superiores. Hoy vamos a hacer una comparación entre tres opciones comunes para el forro de abrigos: seda, nailon y satén. Cada uno de estos materiales tiene sus propias propiedades únicas.
La seda es un tejido elaborado y rico utilizado para la fabricación de ropa a lo largo de la historia, ¡incluso miles de años antes! Una excelente opción para aquellos que quieren ayudar al medio ambiente, está hecha de las fibras naturales de nuestro amigo el gusano de seda. ¿Entonces, pasemos ahora a los beneficios de la seda cuando se usa como forro de abrigo?
La seda es, quizás, una de las fibras más fuertes. Esto significa que, incluso cuando la usas mucho, puede durar mucho tiempo. La seda, por ejemplo, es realmente suave contra tu piel, lo cual es importante porque no quieres que el forro se sienta picoso o rasposo. La seda es una tela maravillosa para el forro de una chaqueta, porque es suave. Puedes llevártela todo el día y seguirá sintiéndose cómoda.
Otra gran característica de la seda es que puede mantenerte caliente en los meses más fríos. La seda es un aislante natural, lo que significa que ayuda a atrapar el calor corporal, manteniéndote caliente cuando hace frío afuera. Pero la seda también es transpirable. Esto significa que es transpirable y permite la circulación del aire, lo cual ayuda a mantener tu temperatura corporal equilibrada. Mantenerse caliente: no hay mejor combinación de tejidos para abrigos que la seda, ya que las fibras naturales de la seda permiten que tu cuerpo respire.
Nunca olvides que uno de los mayores beneficios del nailon es su resistencia. El nailon es un material super resiliente diseñado para soportar golpes. Eso significa que es una excelente opción para forrar abrigos porque durará años, incluso si usas tu abrigo con frecuencia. Sabes que tu abrigo forrado con nailon lucirá bien durante muchas temporadas.
El nailon es otra gran opción para el forro de una chaqueta, ya que te mantiene caliente y es transpirable. El nailon, al igual que la seda, actúa como un aislante natural que retiene el calor en condiciones frías. Pero también permite que el aire pase a través de él, lo que regula tu temperatura corporal. Esto significa que puedes usar una chaqueta forrada con nailon sin preocuparte de que te vayas a poner demasiado caliente.
Otra gran cualidad del nailon es que es resistente al agua. Eso significa que el nailon puede mantenerte seco en caso de lluvia o nieve. Tiene una propiedad única que le permite repeler el agua, lo que lo hace ideal para el mal tiempo. En otras palabras, si te pillan en una tormenta de lluvia, una chaqueta con forro de nailon te ayudará a evitar que te mojes.